No fue el tiempo,
tampoco fue el desamor,
no fue la vida,
tampoco el daño.
Lo que realmente
me estaba matando
era buscar algo,
pero no saber qué era.
No fue el tiempo,
tampoco fue el desamor,
no fue la vida,
tampoco el daño.
Lo que realmente
me estaba matando
era buscar algo,
pero no saber qué era.