En soledad y tinieblas busco
tu cuerpo grave —atmósfera que cubre
de hiedra la pared— y me apoyo en sonrisas
diluidas en nieve, corro hacia donde más crece
la ilusión de tu voz. Buscar
siempre en tinieblas,
y en tinieblas perdiendo, perdiendo
cuerpos graves, lo que nunca encontré,
esta es ya mi sustancia, rumbo
donde me muero, tacto donde la entrega
se entorpece en la piel.