Decías: muerte silencio soledad;
como amor, vida. Palabras
de nuestras provisorias imágenes.
Y el viento se ha alzado leve cada mañana
y el tiempo color de lluvia y de hierro
ha pasado sobre las piedras,
sobre nuestro cerrado zumbido de malditos.
La verdad todavía está lejos.
Y dime, hombre quebrantado en la cruz,
y tú, el de las manos hinchadas de sangre,
¿qué le contestaré a los que preguntan?
Ahora, ahora: antes de que más silencio
entre en los ojos, antes de que más viento
se alce y más herrumbre florezca.