Cientos de aves emprendieron el vuelo.
Emigraron con la esperanza de alcanzar a Simurg:
la pluralidad, la unidad, la perfección.
Pero en el camino muchos se cansaron
y sin fuerzas
se empezaron a desprender de la bandada
hasta que al final sólo se quedaron treinta
momento cuando se dieron cuenta
de que Simurg
no era sino ellos ..
¡Ellos mismos!
Y que por mucho que se hayan desprendido
muchos ..
en realidad no hay pluralidad,
no hay otro
sol
debajo
del cielo
del Pájaro-Rey