Pequeños estallidos en el aire
con olor a jabón de casa antigua
y frasco de perfume en el armario
de una mujer de cabellera mágica.
Incendios forestales en mi cuarto;
por entre los visillos se desviste
y moja los ladrillos con su rojo
a pinceladas suaves todavía.
Teléfonos ladrando entre la lluvia
y meriendas fugaces en el parque;
si el aire se detiene, no respires
para escuchar los árboles creciendo.