Si fuera analfabeta
aprendería en su cuerpo
a leer con códigos
que tienen los pájaros
con códigos que tienen las aguas
y el abecedario transparente
de su desnudez
forma de la luz
reflejada en el espejo
—ajedrez oscuro—.
Si fuera analfabeta
aprendería en su cuerpo
a leer con códigos
que tienen los pájaros
con códigos que tienen las aguas
y el abecedario transparente
de su desnudez
forma de la luz
reflejada en el espejo
—ajedrez oscuro—.
Alguna vez todos fuimos analfabetos, en letras y pieles, claro.
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